Las contraseñas son esenciales para evitar el acceso no autorizado a nuestras cuentas. Te ofrecemos consejos para aumentar tu seguridad y privacidad digital.
Parte de la ciudadanía sigue utilizando claves de acceso poco robustas sin ser conscientes de los peligros que conlleva esta práctica. La creación de una contraseña puede resultar un proceso tedioso y repetitivo que los usuarios prefieren culminar lo más rápidamente posible, pero es crucial tomarse unos minutos para darle la importancia que corresponde.
Además es frecuente que apuntemos las contraseñas en libretas o notas escritas para acudir a ellas en caso de olvido, lo cual es una práctica nada recomendable.
Los riesgos de que alguien acceda a tus cuentas pueden ser muy variados. Sin embargo, y pese a los peligros que conlleva, las claves más utilizadas por los usuarios (1235678, 111111, barcelona, hola…) se repiten año a año, como indican numerosos estudios.
También es cierto que estamos acostumbrados a usar contraseñas perpetuas y/o las mismas claves para varios sitios, servicios, aplicaciones, etc.. Esta práctica también comporta altos riegos de intrusión no autorizada a información que puede llegar a ser sensible, dado que en caso de intrusión la invasión a nuestra privacidad podría afectar a varias fuentes (servicios) de contenido.
Para conseguir que tus contraseñas sean más robustas, puedes seguir estos consejos:
- Longitud: Utiliza al menos 8-10 caracteres. Cuanto más extensa sea, mejor.
- Combina caracteres: Procura que esté compuesta por mayúsculas (A, B, C…), minúsculas (a, b, c…), números (1, 2, 3…) y caracteres especiales ($, &, #…)
- Evita la información personal: No incluyas datos como tu nombre, el de tu mascota, tu cumpleaños, el número de teléfono o tu grupo de música favorito. Cualquiera que te conozca o consiga información sobre ti podría adivinarlos fácilmente.
- Cuidado con elegir las más comunes: Son desaconsejables prácticas como memorizar en función del teclado (ej.: “123456” o “qwerty”) o usar expresiones hechas (ej.: “teamo”, “iloveyou”).
- No utilices patrones sencillos: Un ejemplo sería hacer que la primera letra esté en mayúscula seguida de 4 ó 5 en minúscula o usar uno o dos números y finalizar con un carácter especial como un punto o signo de exclamación (Ej.: Perro26!). Esta no es una buena idea.
- No reutilices: Crea claves diferentes para cada cuenta online. De esta forma, si alguien consigue acceder a una concreta, no tendrá acceso al resto de tus servicios.
- Si el servicio o aplicación ofrece la posibilidad de activar el servicio de doble autenticación, actívalo. Ello te permitirá que además de ser obligatorio la contraseña para el acceso a los contenidos, tengas que introducir un código temporal de un solo uso que podrá ser enviado automáticamente a tu dirección de correo electrónico o vía SMS (mensaje) a tu teléfono móvil. Este tipo de prácticas es cada vez más frecuenta y sectores como la Banca Digital lleva ya tiempo usándolo.
Para poder seguir todos estos consejos de manera sencilla, el Instituto Nacional de Ciberseguridad (INCIBE) ofrece una fórmula que se puede seguir cada vez que haya que registrarse en un sitio web. Puedes consultarla pinchando en este enlace.
A pesar de lo fuertes o robustas que sean las contraseñas, con el paso del tiempo pueden verse comprometidas. Por este motivo, es importante actualizarlas periódicamente para mantener la seguridad y una manera de no olvidarse es usar el truco ‘4 estaciones, 4 contraseñas’. Te recomendamos que cada vez que haya cambio de estación cambies tus contraseñas.
Por último, hay que ser consciente de que cada persona debe manejar muchas claves diferentes y puede tener dificultades para acordarse de todas. Para solucionar este problema, es recomendable ayudarse de un gestor de contraseñas que sea fiable. De esta manera, solo hace falta recordar la que hayas elegido para acceder al gestor de contraseñas, conocida como clave maestra.
En el mercado digital existen muchas soluciones de este tipo, con distintos tipos de suscripción y coste. En OZONIA nosotros recomendamos por ejemplo el servicio de LASTPASS que permite el uso gratuito en su suscripción básica. Más información y creación de una cuenta gratuita aquí: Lastpass.